Locales de distintos rubros de Río Gallegos comenzaron con la atención al público bajo las estrictas normas vigentes de bioseguridad que demanda la nueva normalidad. Muchos resaltan la responsabilidad de la gente y otros advierten como una experiencia interesante poder contar con las mesas en las veredas de sus establecimientos.
En ese sentido, Daniela, integrante de la firma Marcos Shopping Center, resaltó que “la gente es muy responsable con lo que se le pide, por ejemplo, con el distanciamiento social, el uso del barbijo y el alcohol en gel. También destacó lo que pasa cuando alguien debe ir al baño ya que también, en todo momento, se levantan y salen con el barbijo puesto y la verdad que todos han respondido muy bien”, dijo.
Asimismo, Daniela contó que a los clientes “les explicamos al llegar cuál es el protocolo a seguir y se lo cumple. Nosotros estamos abiertos de 11 a 23 horas y la verdad que la posibilidad de contar con sillas y bancos afuera ha sido exitosa porque hemos tenido días muy lindos y la gente los ha sabido aprovechar”, puntualizó.
Por su parte, Walter Classen de la tradicional firma Belfast, explicó que “después de cuatro meses sin trabajar, la gente de a poquito está viniendo y está tomando muchos recaudos con sus amigos. Se respeta el distanciamiento, que es fundamental para poder continuar trabajando”.
Walter remarcó que “nosotros somos muy insistentes en esto del protocolo. La idea es que todos los negocios actúen de la misma forma. Tenemos distanciamiento en las mesas, respetamos la cantidad de personas en el local, los horarios y también hay mucho control por parte de la Municipalidad, que también eso está bueno”, señaló.
Asimismo, durante estos primeros días de reapertura, destacó como algo llamativo que los clientes querían estar afuera y durante esta semana “fue más la gente joven que vino. Es más, no tuvimos tanta gente superior a los 40 años”, señaló.
Finalmente, Francisco Fadul, de la firma Moma y Buffalo, dijo que para nosotros el balance es “positivo” y agregó: “Acá en Moma se abrió una parte pequeña, donde era la parte de cervecería, porque el salón grande está cerrado por refacciones que posiblemente la semana que viene esté abierto. Pero por lo que hemos visto en estos días que llevamos de atención al público y de apertura general de lo demás gastronómicos, es un gran paso. Para nosotros fue un año duro sin ninguna duda. Y esto entonces por supuesto que ayuda”, dijo.
Además, Fadul destacó el funcionamiento de la herramienta de trazabilidad. “Es muy buena porque ayuda, llegado el punto y si hubiera algún caso positivo, a realizar un seguimiento de quien estuvo en el lugar en el momento. Y después respetando todos los protocolos que son muy similares, o casi los mismos, que cuando pudimos abrir en el mes de julio. Eso sí, advierto que la gente lo toma con mucha naturalidad a los protocolos y estoy sorprendido porque respondió muchísimo mejor y con muchísima mayor responsabilidad que lo que fue el mes de julio pasado”, confesó.
Finalmente, Fadul recordó que el local está abierto a partir de las 6 de la tarde y que en el caso de Buffalo los fines de semana están abriendo también al mediodía.