A un año de asumir la intendencia de Pico Truncado, Maimó tiene “falta sin aviso”, dicen los empleados municipales.

Los vecinos de Truncado recuerdan al Maimó desafiante de los últimos días de noviembre de 2019, cuando se manifestaba preocupado por el cumplimiento del pago de aguinaldos y sueldos, y la recategorización de 150 empleados que pasaron de la categoría 15 a la 24 con 4 años de servicio.

Muy lejos quedaron las promesas de campaña, reiteradas en cada aparición pública del actual jefe comunal, donde repetía que trabajaría para la concreción de un nuevo hospital, un gimnasio municipal y viviendas para los vecinos, promesas incumplidas por la gestión de Omar Fernández.

Apenas asumió, Osvaldo Maimó despidió 208 trabajadores municipales, quienes habían ingresado al municipio en la gestión anterior, a cargo de Omar Fernández, y dejó sin recategorización a 253 trabajadores más. Los despedidos realizaron un amparo conjunto. No hubo marcha atrás, el caso sigue judicializado.

“Un año sin emitir sonido” dicen los vecinos de Maimó, y esperan que se tomen medidas ante la virtual acefalia. Su círculo íntimo asegura que el intendente está aislado por ser una persona con riesgo de salud.

En esta incertidumbre, en la ciudad no tuvieron agua por semanas, el Hospital no tiene Director, y la Municipalidad, ¿tiene intendente?