
El hecho delictivo tuvo lugar a metros de la Costanera Local. “Lo agarraron por atrás, lo empujaron y pegaron una patada, lo tiraron contra el cordón, pudo haberse golpeado la cabeza”, indicó Micaela Peralta, hermana del afectado.
Le lograron sustraer un teléfono celular y estuvieron a punto de robarle la perrita shar pei que estaba paseando, presuntamente para venderla o utilizarla para criadero clandestino, de los cuales abunda en la ciudad.
“La tuvo que soltar y la perrita logró correr mucho para escaparse, luego mi hermano la tuvo que ir a buscar y la llevó con la dueña explicándole toda la situación, quien después nos acompañó en todo momento”, declaró Micaela.
En cuanto a los sujetos que iban en la moto color negro y sin patente, uno tenía un tatuaje debajo del ojo derecho, mientras que el otro estaba encapuchado. Una situación frecuente en las grandes ciudades, pero una modalidad de robo que se recién comienza en la Capital Santacruceña.
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