“PREVENCIÓN SÍ, CIRCO NO: EL VIENTO PASÓ… EL SHOW SIGUE”
Nadie en Santa Cruz —NADIE— está en contra de la prevención.
Acá vivimos con viento, nieve, hielo, y hasta con gobiernos que soplan más que las ráfagas.
La prevención es necesaria. La responsabilidad, también.
Pero una cosa es prevenir…
y otra muy distinta es paralizar una provincia entera por “vientos fuertes”, como si fuera la primera vez que sopla en la Patagonia.
Lo que vimos esta semana no fue gestión:
fue show.
Zona norte golpeada, zona sur paralizada sin explicación
En la zona norte hubo daños reales:
casas afectadas, infraestructura dañada, pesqueros hundidos.
Ahí sí hacía falta presencia, herramientas, maquinaria, decisiones.
En la zona sur, en cambio, no pasó nada de envergadura.
Pero igual se frenó todo.
Río Gallegos quedó en “estado de pausa”:
- Hospitales suspendiendo turnos dos días seguidos —esos turnos que cuesta MESES conseguir.
- Escuelas cerradas cuando los chicos no llegan ni a 50 días de clases en el año.
- Oficinas públicas en modo “cerramos por las dudas”.
Todo eso, mientras afuera el viento era… Patagonia en modo Patagonia.
Mucho protocolo de escritorio, cero acción de verdad
Acá la pregunta no es si había que prevenir.
La pregunta es qué hace el Gobierno además de subir fotos.
Porque si prevenir significa cerrar todo sin criterio, sin evaluar daños reales, sin coordinar con los municipios, sin tener un plan de contingencia, y sin personal capacitado…
entonces eso no es prevención.
Eso es improvisación con estética de emergencia.
El Gobierno que más trabaja… para las cámaras
Funcionario pintando escuelas en campaña.
Funcionario limpiando galpones para la foto.
Funcionario levantando papeles para el reel de Instagram.
Funcionario posando con el chaleco amarillo como si fuera una serie de Netflix.
Todo muy lindo para redes, pero:
la provincia no se gestiona con un iPhone en la mano ni con un reel de 30 segundos.
Mientras tanto:
- No hay un plan serio de contingencia climática.
- No hay coordinación real con Río Gallegos.
- No hay herramientas para asistir a quienes de verdad la pasaron mal en zona norte.
- No hay un COE funcionando como corresponde.
Hay, eso sí, conferencias, posteos y épica barata.
¿Por qué con Río Gallegos no? ¿Y por qué con otros municipios sí?
Otra pregunta que nadie responde.
Cuando se trata de articular con el Municipio de Río Gallegos, desaparecen los teléfonos, las ganas.
Cuando se trata de municipios más afines…
la cosa cambia mágicamente:
- Aparecen recursos.
- Aparecen funcionarios.
- Aparecen soluciones veloces.
¿El viento también distingue colores políticos?
¿O el criterio es otro?
El viento pasó. El verso quedó.
En la Patagonia sopla fuerte.
Pero no lo suficiente como para justificar que cada ráfaga sea excusa para apagar la provincia.
La gente necesita gestión, no fotos.
Necesita Estado, no reels.
Necesita planificación, no acting.
Como dijo alguien por ahi:
“Si cada viento fuerte es un feriado administrativo, en Santa Cruz deberíamos vivir encerrados. Y el único huracán real sería la falta de gestión.”