El plan de vacunación nacional definió como prioridad para inocular al personal de salud. Con el sistema por goteo que tiene la producción de vacunas a nivel mundial, desde el gobierno nacional se repetía la  intención de  administrar la “poca cantidad” de dosis recibidas, para el sector sanitario;  o eso decían.

En este difícil contexto en el que  miles de adultos mayores –que corresponden con el segundo grupo prioritario detrás de los trabajadores de la salud– intentan inscribirse en los listados de vacunación;  algunas personas  han sido priorizadas.

Intendentes, diputados, choferes, familiares y amigos del poder  han accedido a las vacunas cuando no correspondía. Esto sucedió en todo el país.

Santa Cruz, no fue la excepción.

En este sentido, el ministro de Salud de la provincia, Dr. Claudio García, indicó que las investigaciones administrativas sobre estos hechos están avanzadas: “ya se tomaron las declaraciones a las personas involucradas”.

El ministro aclaró que “en principio se desprende que existe responsabilidad y una  afectación de los convenios colectivos de trabajo;  y eso determina la separación del cargo de los directores hospitalarios”.

En referencia a las posibles sanciones, indicó que esa función le corresponde a la Fiscalía de Estado. “Converse con el fiscal y le pase toda la información que tenemos de la investigación” explico el médico.

Otra de las cuestiones que quedan por analizar es si serán aplicadas las segundas dosis a las personas que accedieron a la primera inoculación de manera irregular.

En este marco, García señalo que el objetivo de la nación es tener a todas las personas vacunadas.

“Desde el sanitarismo le doy una respuesta: TODOS DEBEN SER VACUNADOS. Desde la función pública, puede ser distinta la respuesta. Necesitamos proteger a todas las personas, porque si no están vacunadas corren riesgos. Deben ser vacunadas “finalizó.