Reyes, Garrido y Acevedo se alinearon con el Gobierno de Javier Milei para privatizar y avanzar con la llamada MODERNIZACIÓN del ESTADO. 

Se aprobó la Ley Bases en Diputados. La iniciativa tuvo 142 votos a favor y 106 en contra en general. Hubo 5 abstenciones. Se aprobaron las delegadas o superpoderes para el Gobierno, las privatizaciones, la reforma del Estado y la reforma laboral. Los legisladores de Santa Cruz fueron claves para lograr la votación y formaron parte del círculo que ahora rodea y apoya al Gobierno de La Libertad Avanza.

ROXANA REYES

La ley establece la privatización de Aerolíneas y de YCRT. También se aprobó la reforma laboral que recorta derechos a los trabajadores. 

Reyes y Garrido votaron a favor del proyecto impulsado por el Gobierno de Milei y Sergio Acevedo prefirió irse del recinto para no dejar clara su postura. Formaron parte del apoyo clave para la sanción de la norma.

Los legisladores del bloque Unión por la patria votaron en contra y acusaron al gobierno de avanzar con un plan neoliberal.

Así en su segundo round parlamentario, el Gobierno de Javier Milei consiguió aprobar en general la nueva versión, más acotada, de la Ley Bases, que incluye una reforma laboral.

La votación en general obtuvo 142 votos a favor, 106 rechazos y 5 abstenciones. En contra de la ley votaron Unión por la Patria, la Izquierda, los socialistas santafesinos Mónica Fein y Esteban Paulón y la cordobesa Natalia De La Sota.

JOSÉ LUIS GARRIDO

Los cambios incorporados en esta versión del proyecto hicieron que legisladores que en el verano habían votado en contra de la ley, esta vez no lo hicieran. Entre ellos, los radicales Facundo Manes y Pablo Juliano que optaron por la abstención, y la líder del GEN, Margarita Stolbizer, que fue por la afirmativa en general aunque voto en contra de varios capítulos enteros.

También se abstuvieron los radicales Fernando Carbajal y Marcela Coli, y la lilita Mónica Frade.

Los artículos de las facultades delegadas, las privatizaciones, la reforma del Estado y la reforma laboral fueron aprobados. 

Con el PRO dispuesto a avalar todo el proyecto y el kirchnerismo a rechazar su totalidad, la aprobación terminó dependiendo las bancadas de la UCR, que conduce Rodrigo De Loredo, y de Hacemos Coalición Federal, que reúne un grupo variopinto de legisladores bajo la conducción de Miguel Ángel Pichetto. Ambas bancadas condicionaron todos los cambios en el texto.