De ser parte de Los Pumas a brillar en el atletismo: quién es Franco Florio, el argentino más rápido de la historia.
Con 22 años, el ex jugador de Los Pumas 7 pulverizó la marca que los velocistas Carlos Gats y Gabriel Simón habían conseguido a finales de los 90 en los 100 metros llanos
Franco Florio tiene 22 años y logró batir el récord argentino en 100 metros llanos en el Campeonato Sudamericano U23 de Brasil con un tiempo de 10 segundos y 11 centésimas. Atrás quedaron los 10s23 de Carlos Gats (1998) y Gabriel Simón (1999), los hombres más rápidos de la Argentina hasta el 29 de septiembre de 2022 cuando apareció el joven atleta de Villa Santa Rita, Capital Federal.
“Creo que todavía no caigo, no tomo dimensión de lo que logré. Lo más importante era que saliera la marca y se alinearon los planetas”, le expresa con emoción horas después de la hazaña ocurrida en la ciudad de Cascavel, Brasil, donde logró además colgarse la medalla de plata tras finalizar segundo detrás del campeón brasileño Erik Felipe Barbosa Cardoso.
Justamente, Barbosa Cardoso es su principal rival en las pistas y Florio confiesa que en el historial están parejos con tres victorias para cada uno. Aunque, el brasileño es quien manda en la prueba de velocidad con récord sudamericano U23 (10s01) y un puesto 14 en el Mundial de mayores. “Cuando me tocaba ganarle, corríamos en 10s30. Así que venir al Sudamericano y poder hacer estas marcas me pone muy contento”, analizó el plusmarquista albiceleste.
– ¿Tenías alguna noción del tiempo que habías logrado al terminar la carrera?
– Hay muchas carreras en las que me podés preguntar cómo saliste y te puedo decir cómo corrí. Pero en este tipo de carreras que son finales y hay mucha presión te concentrás solamente en eso, estás en piloto automático y no tenes ni idea qué tiempo corriste. Es más, cuando yo cruzo la meta, veo que me ganó por poquito (tres centésimas) y ni estaba pensando en la marca hasta que vinieron todos a decirme. Ahí me di cuenta del récord. Nunca había pensado en eso.
Detrás de un ganador están los entrenadores y para Franco Florio, su coach, Javier Morillo, es una pieza fundamental en el logro histórico para el atletismo argentino. “Está detrás del telón. Muchas veces todo el mundo se fija en el atleta, pero lo importante es que él está atrás y como siempre digo, es el cerebro que planifica todo. Desde el primer día que confió en mí y no tengo más palabras de agradecimiento”, gratifica el alumno.
– ¿Cómo es la preparación de un atleta de alto rendimiento?
– Lo que es la preparación en el día a día es entrenar mucho, comer bien, dormir y recuperarse en kinesiología para estar mejor al otro día. En eso tenemos que ir avanzando porque en otros lugares con mejor infraestructura como Brasil, Estados Unidos o Europa son temas que dentro del atletismo lo tienen muy aceitado y si bien en Argentina tenemos mucho conocimiento, faltan materiales. Entreno todos los días en CeNARD, como ahí y vuelvo para mi casa. Esa es mi rutina de todos los días, aunque parezca aburrida me encanta disfrutarla. Es muy linda la medalla y el récord, pero para llegar acá tenés que hacer todo lo anterior.
– ¿Y cuáles son los sacrificios que conlleva este deporte para llegar a los objetivos?
– Todos los deportistas de alto rendimiento tenemos que dejar cosas de lado y hacer sacrificios, pero es lo que toca cuando uno quiere conseguir cosas importantes. Todo no se puede tener, lo vivo con naturalidad y ya me acostumbré. No tengo el talento de Usain Bolt, ojalá lo tuviera para hacer otras cosas más, pero si quiero como objetivo estar entre los mejores del mundo que es a lo que apunté tengo que estar cien por ciento en la cabeza en el atletismo.
Franco Florio es tres veces campeón nacional de atletismo en los 100 metros llanos. Además, tiene el récord vigente
Que Franco Florio es un amante de los deportes no caben dudas. Apasionado por el rugby desde chico, dado que de los 5 a los 20 añoscorrió con la ovalada en sus manos en Belgrano Athletic Club hasta llegar al seleccionado nacional con la camiseta de Los Pumas 7. Estuvo a punto de ir a los Juegos Olímpicos de Tokio con el equipo, pero la pandemia y una decisión del cuerpo técnico le hicieron replantear su destino.
Y allí estaba el atletismo, esperándolo. “Tenía el otro objetivo que era el Nacional de mayores y apunté a eso. Corrimos en 10s24 y el récord argentino era de 10s23. Al estar tan cerca, me quedé en el atletismo, así que fue natural mi salida del rugby. Me dije: ‘Cuando sea grande y tenga 40 años no quiero preguntarme qué tan rápido podía haber corrido’. No me puedo quejar que jugué poco al rugby y además me puse la camiseta de Los Pumas”, reconoció el atleta que está becado por el ENARD y la secretaría de Deportes de la Nación.
Franco Florio jugó en Los Pumas 7 y estuvo a punto de ir a los Juegos Olímpicos de Tokio con el seleccionado de rugby
Su otro deporte oculto fue el básquet. En su barrio, Villa Santa Rita, Florio probó suerte en el club Imperio Juniors. Tenía 16 años y al volver de los entrenamientos de rugby se metía en el gimnasio para tirar al aro. “Era un deporte que quería probar de chiquito, pero cuando fui y movían la pelota tan rápido, no veía nada. Lo único que hacía bien era salir corriendo de contragolpe para embocarla”, recordó entre risas.
El próximo objetivo que se trazó Florio son los Juegos Odesur que se iniciaron este sábado 1 de octubre y se realizarán hasta el próximo 15 de octubre en Asunción, Paraguay, pero el calendario tiene otros campeonatos que lo desafían: “Lo primordial es traer una medalla para la Argentina. También tenemos un Sudamericano de mayores que es muy importante, los Panamericanos a fin de año e intentaremos clasificar al Mundial que habíamos quedado muy cerquita. Pero esto es paso a paso y quiero ir día a día”.
Franco Florio con la medalla de bronce en los Panamericanos de Cali, Colombia, tras la prueba de 100 metros llanos
Para Franco no hay imposibles y si ya logró quebrar un récord nacional en 100 metros por qué no soñar con la clasificación a un Mundial o Juego Olímpico, junto a los grandes del deporte. “Bajaron las plazas de 56 a 48 y quedé 69 entre los que iban al Mundial de mayores. La marca mínima es de 10 segundos, pero por puntos en carreras importantes puedo clasificar. Pero con la cabeza primero en los Odesur”, finaliza Florio, el hombre más veloz de la Argentina.
FUENTE: Infobae