Los precios de los alimentos no dan tregua: aumentaron 33% en el año.

Esto surgió de un estudio que realizó la entidad Consumidores Libres. En julio la suba fue de 3,3%, similar a las estimaciones de otras consultoras.

La inflación de julio y los precios de los alimentos siguen presionando sobre el indicador.

El relevamiento que hace la asociación Consumidores Libres en supermercados y negocios barriales mostró que el conjunto de una canasta de 21 productos tuvo un aumento del 3,38% durante el mes pasado y acumula, en lo que va del año, el 33,07%.

En el séptimo mes del año el rubro de mayor incremento fue almacén, con un promedio del 4,2%. En este caso, en términos de dinero, el aumento fue de $ 876 en un mes para una canasta que alcanzó un costo total de $ 5.996.

Entre estos productos, en particular, el aceite (11,43%) y el arroz (9,38%) fueron los de mayor aumento en el mes. En tanto, frutas y verduras se mantuvieron más estables, con una suba promedio del 0,93%. Esto se dio porque hubo caídas fuertes en la papa negra (-18,75%) y la naranja (-17,65%).

De acuerdo con este relevamiento, los distintos tipos de carnes tuvieron una suba promedio fue del 3,77% en el mismo lapso. En tanto, en el acumulado del año, el rubro se incrementó 40,93%.

Precisamente para frenar la inercia inflacionaria de este alimento básico de la canasta, el Gobierno dispuso un cupo a las exportaciones con la idea de ir eliminándolo progresivamente en la medida que el precio se mantenga estable.

Otra medición de alimentos y bebidas, de la consultora LCG que releva 8000 productos online en supermercados, mostró que el mes pasado, el 13,2% de esos productos registraron subas. Lo hicieron en un nivel promedio del 3,3% en las últimas cuatro semanas y del 3,7% medidas punta a punta, señaló la consultora en su último informe.

Para contener el alza persistente en los precios de los alimentos, el Gobierno implementó distintos programas. Además de Precios Cuidados, hace poco se sumó el programa de Súper cerca, que busca contener las subas en los comercios de proximidad. De igual forma, y en la misma línea,  se creó la Ley de Góndolas que tiene por objetivo garantizar una distribución equitativa de los distintos proveedores para diversificar la oferta de productos y marcas y garantizar el acceso de las pequeñas empresas.

Aún no hay resultados concretos. La inflación aún sigue ganándole a los sueldos. Y la situación se pone cada vez más difícil para los bolsillos argentinos.